El fruto del avellano se compone hasta un 65% de aceite, por lo que es uno de los frutos secos más nutritivos y remineralizantes.
Basta con tomar unos 20 o 25grs. de frutos al día, hacer «leche» de avellanas o preparar un paté con avellana molida, un poco de mantequilla y azúcar moreno o miel, para restablecernos en casos de anemia.
Su corteza por otro lado tiene materias tánicas, aceites y alcoholes que por sus principios astringentes pueden usarse para detener hemorragias y diarreas. (35grs. de corteza/l. hervida durante 20 min., se filtra y endulza con miel).
Las hojas también tienen taninos, además de flavonoides que sirven para tratamiento de vasos sanguíneos, además de propiedades astringentes, venotónicas y antiedematosas. Es por ello que también sirve para tratar casos de várices o hemorroides y para tratar el exceso de menstruación, haciendo una infusión con 5 hojas que dejaremos de tomar en cuanto notemos que la hemorragia disminuye.También podemos utilizar la infusión de 25grs. de hojas/litro de agua para desinfectar heridas, para tratar llagas y úlceras en la piel.
Mascarilla facial para pieles maduras y fatigadas con hojas de avellano una vez hecha la infusión con las hojas, se machacan las hojas y se aplica sobre el rostro durante 10 min. aclarando el rostro con agua.para pieles maduras y fatigadas.
Bibliografia:
http://alimentosparacurar.com/remedios-caseros/n/4202/remedios-caseros-con-el-avellano.html